Otro Tomás

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Por Gustavo Alvarez Gardeazábal

La sinverguenzería se apoderó de este país.El señor Tomás González la impuso como norma para los que ejercen el poder ejecutivo cuando dijo olímpicamente que la empresa Connecta,que era suya y después siguió siendo de su esposa, podría contratar con el estado hasta por seis mil millones cuando él ejercía de ministro porque no existía ningún impedimento ni jurídico ni ético.

Ahora nos resulta otro Tomás en el gabinete del inefable Enrique Peñaloza.El Secretario de Planeación del Distrito,don Andrés Ortiz Gómez,ha dicho casi lo mismo. Él afirma que no existe impedimento en tener una casa de 2.000 metros cuadrados en el lote de la reserva Van der Hammen ( que Peñaloza quiere urbanizar) y planificar desde su oficina la destrucción de la posibilidad que posee Bogotá de un pulmón ecológico de tal magnitud.

Por supuesto quien respalda que ello suceda es el alcalde Peñaloza porque ha sido desde la oficina del señor Ortiz Gómez desde donde el inmarcesible alcalde de Bogotá ha estado echando para atrás la medida adoptada por el gobierno Petro de convertir esa zona en el dizque mayor bosque urbano del mundo.

El argumento de Peñaloza de levantar allí 80 mil soluciones de vivienda en vez de permitir el gran pulmón que tienen las grandes ciudades , resulta baladí cuando existen todas las posibilidades de hacerlo mejor densificando las áreas ya construídas.

Su terquedad y atrevimiento es solo una expresión de la omnipotencia ofensiva de todos los que han sembrado bolardos en vez de árboles…

PUBLICADA EN ADN MARZO 29 2016

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