El presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, declaró este domingo que la ayuda internacional militar y de inteligencia lo ha vuelto optimista respecto a que encontrarán a 200 escolares secuestradas el mes pasado por militantes islámicos en un ataque condenado a nivel global.
Israel se convirtió en el último país en ofrecer su ayuda a Nigeria desde el 14 de abril, cuando militantes del grupo Boko Haram entraron a una escuela secundaria en la aldea nororiental de Chibok y capturaron a 276 muchachas que realizaban un examen.
Algunas lograron escapar, pero cerca de 200 permanecen desaparecidas.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, no entregó mayores detalles, pero Jonathan afirmó que en una conversación telefónica Netanyahu ofreció enviar a un equipo de expertos en contraterrorismo.
Estados Unidos y Gran Bretaña han enviado a expertos y eso, junto al despliegue por parte de Nigeria de dos divisiones del Ejército hacia la región fronteriza, señala que el esfuerzo de búsqueda está cobrando impulso.
No obstante, el movimiento tiene lugar en medio de fuertes críticas contra el Gobierno de Jonathan por responder demasiado lentamente a la crisis.
«Nigeria estaría complacida de tener desplegada a la pericia antiterrorismo de Israel, reconocida globalmente, para respaldar a las operaciones en curso», dijo el Senado nigeriano a través de un comunicado.
Jonathan está «muy optimista que con la comunidad internacional completa desplegando sus considerables habilidades y activos militares y de recolección de inteligencia pronto será alcanzado el éxito», agregó.
La ira por el ataque se ha concentrado en Boko Haram, un grupo que ha desestabilizado partes del noreste de Nigeria y que ha matado a miles de personas desde el 2009 en su lucha por instaurar un Estado islámico.
El presidente de Francia, François Hollande, ofreció este domingo organizar una cumbre en París el próximo sábado con Nigeria y sus vecinos, que se concentrará en el grupo militante.
«Con el presidente nigeriano Goodluck Jonathan, he propuesto realizar una reunión con los países fronterizos con Nigeria», declaró Hollande durante una visita a la capital de Azerbaiyán, Bakú.
Los líderes de Benín, Camerún, Chad y Níger también podrían asistir, y Gran Bretaña, la Unión Europea y Estados Unidos probablemente también enviarán representantes, dijeron asesores de Hollande.
Una campaña en redes sociales usando el «hashtag» de Twitter #BringBackOurGirls ha elevado las preocupaciones sobre el secuestro, que ha tocado una fibra sensible debido a la vulnerabilidad de las niñas y a la brutalidad de los atacantes.
El líder de Boko Haram, Abubakar Shekau, amenazó este mes con vender a las muchachas «en el mercado», aumentando las preocupaciones sobre su suerte.
La primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, calificó el sábado el ataque como un «acto desmedido».
Este domingo, alrededor de 100 personas protestaron en Unity Park, en el centro de Abuya, por las niñas, entonando el cántico: «Traigan de vuelta a nuestras chicas ahora y vivas».
Varios policías observaron la manifestación en una ciudad que ha visto la muerte de decenas de personas en dos ataques en el último mes.
«El Gobierno podría ver esta protesta como una vergüenza, pero tenemos el derecho a reunirnos. Esto no es sobre presentar a Africa en forma negativa», declaró el portavoz de las protestas diarias, Rotimi Ozawale.
REUTERS