El mandatario José Mujica admitió este martes que «es posible» que Uruguay se convierta en un destino turístico cannabico y explicó que la idea es mantener a los consumidores de marihuana dentro de márgenes tolerables. «Nosotros no vamos a fomentar la fumata, la bohemia, todo eso que lo quieren revestir de inocuo y todo eso», comentó en una entrevista de la agencia AP.
«Nos tratarán de viejos reaccionarios. Pero ésta no es una política que busque expandir el consumo de la marihuana. Lo que busca es mantenerlo dentro de una racionalidad y que no hay que deslizarse en el camino de una enfermedad», agregó.
Mujica firmó este martes la reglamentación de la ley que legalizó la marihuana y que transformó a Uruguay en el primer país del mundo en tener un mercado legal y regulado de cannabis, desde su siembra hasta su venta al público.
Con la autorización del mandatario, la ley cobra plena vigencia y todo el sistema previsto en la ley comienza a funcionar. En los próximos días hará un llamado a interesados en cultivar la marihuana que venderá el estado. Se otorgarán entre dos y seis licencias para sembrar entre una y dos hectáreas de marihuana en invernaderos. Los residentes legales en Uruguay que se registren podrán comprar hasta 10 gramos a la semana y 40 por mes en una red de farmacias.
Respecto a los problemas de la normativa, definió como «flor de lío» la posibilidad de que los productores clandestinos de marihuana de Paraguay, a través del narcotráfico, vendan el producto más barato que la hierba legal. Incluso mencionó que un jerarca de Paraguay ya les envió un mensaje donde le advertía que seguirían vendiendo las dosis y que Montevideo nunca producirá al costo de ellos.
Explicó que, para evitar esa diferencia, los impuestos que llevará la marihuana legal serán variables para lograr adecuar su precio. «Una parte del impuesto está puesto como un comodín, que se puede utilizar su aumento o su rebaja de acuerdo a lo que está haciendo la competencia», dijo.
El presidente de Uruguay cree que no solo que el mercado ilegal de la marihuana mueve mucho dinero sino que no descartó que los dineros provenientes de esa actividad ilícita hayan ingresado a la política de su país, en la campaña electoral.
Aseguró no acompañar la idea que la marihuana es benigna, ya que «ninguna adicción es buena». Y reiteró que la legalización se trata de un «experimento» para mantener a los consumidores dentro de límites tolerables.
La nueva ley, impulsada por el presidente José Mujica, generó una amplia polémica al establecer taxativamente el «control y la regulación por parte del Estado de la importación, exportación, plantación, cultivo, cosecha, producción, adquisición, almacenamiento, comercialización, distribución y consumo de la marihuana y sus derivados».
Según un informe de la ONU, Paraguay es el mayor productor en Sudamérica con 5.900 toneladas año. La producción de toda Sudamérica es calculada en 10.000 toneladas. Paraguay, en cuanto a cosecha solo está por detrás de México, que aparece con 7.400 toneladas.