Por Sonia Rodríguez
En manos de la Procuraduría, la Fiscalía y la Contraloría se encuentra una auditoría forense a Saludcoop que dejó al descubierto el maquillaje en los libros para ocultar millonarias pérdidas, sobrecostos en la compra de clínicas, fraudes al Fosyga para el pago de recobros, engaños a jueces y la presencia de “carteles” dedicados a la venta de incapacidades y medicamentos.
La UNIDAD INVESTIGATIVA DE RCN LA RADIO conoció en detalle la auditoría que la firma K.P.M.G. realizó a Saludcoop y que puntualmente se concentró en el área financiera.
Después de 6 meses de análisis de cuentas, documentos, contratos y libros de contabilidad la auditoría estableció que la situación financiera de Saludcoop era muy distinta a lo que reflejaban sus estados contables.
Según los libros a 31 de diciembre la EPS reportaba utilidades por 16 mil millones cuando en realidad presentaba pérdidas por 80 mil millones de pesos. Para el primer trimestre de 2011 el maquillaje de los libros registraba un saldo en rojo de 9 mil millones de pesos, aunque para ese momento sus pérdidas superaban los 40 mil millones de pesos.
Otra de las prácticas que dejó al descubierto la auditoría forense fue un carrusel de cheques para el supuesto pago de deudas por servicios de salud. Aunque el cheque era girado y reportado a la contabilidad, los proveedores no recibían el dinero, pero Saludcoop si utilizaba los recibos para legalizar sus recobros al Fosyga.
La ley establece que al Fosyga sólo se le puede cobrar cuando la EPS ya ha cancelado los servicios de salud.
Fuentes vinculadas al sector de la salud indicaron a RCN LA RADIO que estas dos prácticas encierran delitos muy graves, por lo que la Fiscalía estudia la posibilidad de abrir investigación inmediata contra el ex presidente de Saludcoop, Carlos Gustavo Palacino, la junta directiva de la EPS y los responsables de los temas financieros y contables.
En lo que tiene que ver con la compra de 3 de clínicas, los investigadores tratan de establecer si esos negocios se hicieron con recursos de la salud y lo que sería más grave, si presentan un sobrecosto del 50%.
Además de esta auditoría forense, la Contraloría descubrió que Saludcoop engañó a la justicia y reclamó el pago de 22.734 millones, haciendo creer que se trataba de un negocio por la adquisición de la Ciudadela Salud, cuando en realidad esos dineros hacían parte de los recursos del sistema de salud.
Por este engaño a los jueces la Contraloría pidió a la Fiscalía investigar el papel que jugó la mano derecha de Palacino en Saludcoop, Alberto Castro Cantillo.
La investigación interna en Saludcoop también dejó al descubierto la existencia de lo que han denominado el cartel de las incapacidades y de la venta de medicamentos.