Cae proyectil en la embajada rusa en Siria

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AMAN, Jordania (AP) — Un proyectil de mortero cayó el domingo en la embajada rusa en Damasco, informaron medios estatales, en tanto que Moscú anunció su disposición de enviar observadores militares que garanticen el compromiso del gobierno sirio de poner sus armas químicas bajo control internacional.

Rusia es uno de los países que respalda al presidente sirio Bashar Assad, y los rebeldes que luchan para derrocar a su régimen ya han atacado la misión diplomática con cohetes y obuses de mortero.

En Moscú, la cancillería confirmó el ataque y dijo que los rebeldes dispararon morteros que cayeron en el interior de la embajada. Tres empleados resultaron heridos, pero su vida no corre peligro, dijo el ministerio, que no facilitó más detalles.

La embajada rusa está en el elegante distrito de Mazraa, en Damasco, donde también se encuentran diversas organizaciones de seguridad sirias, un estadio de fútbol y centros nocturnos.

En otro ataque con morteros afuera de la capital, dos personas resultaron heridas al caer dos obuses en un edificio residencial en el suburbio de Jaramana, informó la agencia SANA.

Ambas acciones ocurren en momentos en que prosiguen las discusiones diplomáticas sobre cómo recolectar el arsenal de agentes químicos y biológicos de Siria a fin de impedir que se repita otro ataque como el del 21 de agosto en el que, según Estados Unidos, se utilizaron armas químicas y murieron más de 1.400 personas, incluidos 400 niños, en las afueras de Damasco.

Grupos de activistas consideran que la cifra de muertos fue mucho menor en ese ataque, debido al cual Washington estuvo al borde de lanzar una operación bélica contra Siria. El gobierno de Assad acusa a los rebeldes de utilizar armas químicas.

La semana pasada, las Naciones Unidas confirmaron en un informe la utilización de gas sarín en el ataque de agosto. Rusia culpó de esa acción a los rebeldes, en tanto que Estados Unidos y sus aliados europeos y árabes la atribuyeron a las fuerzas de Assad.

El ministro ruso del Exterior, Serguei Lavrov, dijo el domingo que Moscú está listo para enviar observadores militares a Siria a fin de garantizar la seguridad de los esfuerzos para eliminar las armas químicas de ese país.

Sin embargo, el funcionario ruso dijo que su país no está considerando enviar un contingente militar completo.

Siria entregará sus armas químicas, de acuerdo con un plan concertado entre Estados Unidos y Rusia. El resguardo de las armas es uno de los principales desafíos de este plan, incluido cómo impedir que sean robadas.

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