Seguridad en Colombia se estaría deteriorando

Compartir:

En Colombia la situación de seguridad en los aspectos más claves estaría mostrando un constante deterioro, y aunque en algunos casos los indicadores señalan que varias conductas delincuenciales marcan un retroceso, el panorama es peor que hace cuatro o cinco años.

En el primer semestre de este año, habrían aumentado el homicidio, los sabotajes contra la infraestructura económica, los retenes ilegales y los actos terroristas. En cambio, en el mismo lapso, los secuestros y los ataques contra la Fuerza Pública habrían experimentado un franco descenso.

Esos son los principales hallazgos del Centro Seguridad y Democracia, de la universidad Sergio Arboleda, consignados en su ‘Balance de seguridad nacional primer semestre 2013’, que se basa en datos de la Policía, del DANE y del centro de información del Centro.

El balance señala que en el caso del homicidio, en comparación con el primer semestre de 2012, ese delito aumentó el siete por ciento, al pasar de 6.918 casos a 7.380 en 2013. La tasa de homicidio por cada cien mil habitantes fue de 34,4, la más alta de los últimos tres años. Para el Centro, eso rompe por primera vez la tendencia a la baja manifestada en los últimos siete años.

Las mayores tasas de homicidio se presentaron en Guaviare (90 casos por cada cien mil habitantes), Valle (82), Caquetá (65), Arauca (55) y Putumayo (55). En cambio, las menores tasas se evidenciaron en Vaupés (cercana a 0), Boyacá (9), Amazonas (12), San Andrés (14) y Bolívar (15).

El balance establece que los mayores aumentos se registraron en Guainía, en donde se pasó de ninguno a cuatro homicidios (400 por ciento); Quindío (incremento de 71 por ciento), Guaviare (54 por ciento), Huila (39 por ciento) y Santander (39 por ciento). Los mayores descensos fueron en Vaupés, con una reducción del ciento por ciento, Vichada (47 por ciento), Norte de Santander (16 por ciento), Bogotá (10 por ciento) y Atlántico (diez por ciento).

De otro lado, en el periodo observado, se presentaron 144 secuestros, 35 casos menos que en el mismo lapso del año anterior, lo que significa una disminución de 20 por ciento. Sin embargo, a pesar del descenso en el último año, el número de secuestro de 2013 fue superior al presentado en al año 2010, cuando se registraron 129 secuestros, es decir, un 12 por ciento menos.

En cuanto a los actores responsables de la comisión de ese delito, el balance atribuye a la delincuencia común el 71 por ciento de los secuestros, pero detecta una reducción del 33 por ciento al pasar de 152 secuestros a 102. Las Farc fueron el segundo grupo de mayor incidencia en esta conducta con el 15 por ciento de los secuestros. Su accionar se incrementó el 75 por ciento: pasó de 12 casos a 21.

El ELN fue el tercer grupo responsable de los secuestros en Colombia con el 12 por ciento de los casos, y un aumento de 31 por ciento, pues pasó de 13 casos a 17. En último lugar figuran las bandas criminales con el tres por ciento de los secuestros y un aumento del ciento por ciento, al pasar de dos casos a cuatro. Los departamentos más afectados fueron Valle (14 por ciento), Bogotá (12 por ciento), Cauca y Arauca (11 por ciento cada uno), y Norte de Santander (siete por ciento).

ATAQUES A FUERZA PÚBLICA

En el primer semestre de 2013, los grupos armados ilegales atacaron a la Fuerza Pública en 131 ocasiones. En comparación con el primer semestre del año anterior se registró un descenso del 20 por ciento, con 33 casos menos. No obstante, en comparación con el primer semestre de 2008 los ataques contra la Fuerza Pública muestran un crecimiento del 68 por ciento, al pasar de 78 acciones hace cinco años a 131.

Según el ‘Balance de seguridad nacional primer semestre 2013’, la emboscada (con el 54 por ciento de los casos) fue la modalidad más utilizada por los grupos ilegales para atacar a la Fuerza Pública. Le siguen los hostigamientos tanto a unidades móviles como fijas, con el 32 por ciento de los casos; los ataques a instalaciones de la Policía, con el 12 por ciento, y los ataques contra instalaciones de las Fuerzas Militares, con el dos por ciento.

Esos ataques se concentraron principalmente en Arauca (18 por ciento), Antioquia (16 por ciento), Cauca (14 por ciento), Nariño (nueve por ciento), Putumayo (ocho por ciento), Caquetá (siete por ciento) y Norte de Santander y Valle del Cauca (cinco por ciento en cada uno).

RETENES ILEGALES Y SABOTAJES

El Centro Seguridad y Democracia registró 59 casos de retenes ilegales en los primeros seis meses del 2013, la cifra más alta de los últimos seis años. En comparación con el mismo periodo del año 2012, esa conducta muestra un incremento del 23 por ciento, y en relación con el año 2008 el incremento es de 293 por ciento.

En este caso, para el centro del universidad Sergio Arboleda, se mantiene la tendencia sostenida al alza en el mediano plazo, pues a pesar de la caída en 2011, los dos últimos años han superado a los cuatro años anteriores.

Se registraron retenes en el 48 por ciento de los departamentos, y las mayores concentraciones ocurrieron en Antioquia (20 por ciento), Cauca (14 por ciento), Arauca (12 por ciento), Norte de Santander (12 por ciento) y Putumayo (10 por ciento). Putumayo mostró la variación más alta con 600 por ciento, seguido de los aumentos en Antioquia (200 por ciento), y Chocó (200 por ciento).

También hubo 58 ataques contra las distintas infraestructuras económicas del país, siendo esta cifra la más alta de los últimos seis años, y casi triplica los ocurridos en 2010. Con respecto al 2012 se presentó un aumento de cinco por ciento.

Así mismo, se registra un crecimiento absoluto del 28 por ciento en esas acciones al comparar el primer semestre de 2008 y el mismo lapso de 2013, al pasar de 45 casos a 58, respectivamente. El balance destaca que el primer semestre del 2010 mostró la cifra más baja de los últimos seis años, cuando se presentaron 20 acciones de sabotaje.

«La dinámica de sabotaje por modalidad ubica a los ataques contra la infraestructura petrolera como los de mayor impacto al concentrar el 72 por ciento de los casos», dice en uno de sus apartes el balance. «Le siguieron los ataques contra la infraestructura energética con el 14 por ciento de los casos, los ataques contra la infraestructura vial con el 10 por ciento, y finalmente los ataques contra la infraestructura de las comunicaciones con el dos por ciento».

En términos comparativos, solamente las acciones en contra de la infraestructura petrolera mostraron incrementos en comparación con el 2012 (35 por ciento) al pasar de 31 casos a 42. En contraste, la mayor reducción la registraron los ataques contra la infraestructura vial, con un 40 por ciento menos. También descendieron los sabotajes contra la infraestructura energética con una reducción del 33 por ciento.

Los ataques contra la infraestructura de las comunicaciones no variaron: hubo dos casos en cada semestre. Los sabotajes se concentraron en Norte de Santander con el 41 por ciento de los casos, seguido por Putumayo con el 22 por ciento, Arauca con el 16 por ciento, y La Guajira con el siete por ciento.

ACTOS DE TERRORISMO

Los actos de terrorismo, entre los que el balance incluye los ataques contra bienes civiles, establecimientos y automotores, se incrementaron en 75 por ciento. Las Farc fueron responsables del 52 por ciento de ellos, seguidos por grupos sin identificar con el 39 por ciento, el ELN con el cinco por ciento, y las bandas criminales con el cuatro por ciento. Las Farc incrementaron 60 por ciento sus actos terroristas.

Los departamentos más afectados fueron Cauca, donde se concentró el 16 por ciento de los casos, Antioquia (14 por ciento), Meta (nueve por ciento), Putumayo (ocho por ciento), Huila (seis por ciento), Norte de Santander (seis por ciento) y Valle del Cauca (cinco por ciento).

De los 25 departamentos en donde se registró alguna acción de este tipo en el primer semestre de 2013, en 18 se produjeron aumentos, que oscilaron entre 50 por ciento y 700 por ciento. Las mayores variaciones se presentaron en Putumayo, Norte de Santander, Valle del Cauca, Bogotá, Chocó, Cauca y Antioquia.

COMBATE A GRUPOS IRREGULARES

Por último, el balance relaciona 131 combates por iniciativa de la Fuerza Pública contra los distintos grupos irregulares que operan en el país. Estos mostraron un incremento del 30 por ciento, rompiendo la tendencia a la baja sostenida que se venía presentando entre los primeros semestres de 2010 y 2012.

No obstante, la cifra de combates del 2013 se configura como la segunda más baja de los últimos seis años. La mayor cantidad de acciones sucedieron contra las Farc con el 82 por ciento de los casos, contra el ELN el 13 por ciento y las bandas criminales con el 5 por ciento.

Los combates contra el ELN aumentaron un 89 por ciento, y contra las Farc, un 27 por ciento. Cauca fue el mayor escenario de confrontación durante el primer semestre de 2013, al concentrar el 13 por ciento de los casos. Le siguieron Caquetá (12 por ciento), Arauca (10 por ciento) y Meta (ocho por ciento).

Colprensa solicitó información a la Policía para corroborar o contrastar los datos presentados por el Centro Seguridad y Democracia de la universidad Sergio Arboleda, pero no obtuvo respuesta
– See more at: http://www.eluniversal.com.co/colombia/seguridad-en-colombia-se-estaria-deteriorando-134207#sthash.cDnw3ybn.dpuf

Compartir: