La limusina que en marzo pasado transportó a su morada final en Caracas los despojos mortales del fallecido presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, regresó este viernes a Funeraria San Vicente de Medellín en perfecto estado.
El automotor fue entregado a Funeraria San Vicente por intermedio de la Funeraria Vallés de Caracas que desplazó a uno de sus ejecutivos, licenciado Eduardo Elías Vallés,quien agradeció con una placa recordatoria a Luis Fernando Arango, gerente general de Funeraria San Vicente, el haber facilitado el coche fúnebre.
Este fue el único automotor de América Latina que, por su solemnidad y majestuosidad, estuvo a la altura de las exigencias del gobierno venezolano para el ritual del presidente Hugo Chávez, el cual fue llevado a Caracas en un avión hércules de la Fuerza Aérea Venezolana.