La sección primera del Consejo de Estado ordenó a la administración Distrital, a la Policía y a la Defensoría del Espacio Público que desalojen a los vendedores ambulantes de la Carrera Séptima entre el Palacio de Justicia y la calle 24.
El Alto Tribunal le dio la razón a una ciudadana que manifestaba no poder movilizarse por cuenta de los vendedores apostados en la Carrera Séptima.
En seis meses la administración debe carnetizar a todos los vendedores ambulantes de la zona y proceder a establecer un plan para atender su situación, bien reubicándolos en los centros comerciales populares o mediante programas de apoyo que les ayuden a ganarse la vida sin afectar el espacio público. Incluso los lustrabotas deberán ubicarse en lugares específicos.
En otra determinación clave, el Consejo de Estado le ordena a la Policía que detecte a los vendedores de productos que violen los derechos de autor y proceda legalmente contra ellos. El fallo es trascendental porque, aunque resuelve una situación específica, sienta jurisprudencia sobre la materia.