La iglesia atribuye a una manipulación de la justicia absolución de las Farc por crimen de Monseñor Duarte Cancino

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BOGOTA, 28 de Marzo ¬_RAM_ El Arzobispo de Cali, Monseñor Darió Monsalve, atribuyó a una manipulación de la justicia, la absolución de la cúpula de las Farc por el crimen de Monseñor Isaías Duarte Cancino.
“Aquí hay verdaderos campeones de la mentira. Verdaderos mentirosos, con una habilidad pasmosa para evitar que la verdad se conozca y la mentira es el soporte grande de la impunidad”, precisó Monseñor Monsalve, en referencia al fallo emitido por el Tribunal Superior, el cual dijo no haber encontrado pruebas contundentes para condenar a los cabecillas de las Farc por el crimen de Monseñor Duarte Cancino.
Sin embargo, el arzobispo de Cali dijo que “esperaría que este fallo sirviera en algo para el proceso de paz en La Habana y que sirviera en algo para la reconciliación y para la búsqueda del perdón”.
El prelado dejó entrever la posibilidad de que la iglesia se convierta en parte de este proceso penal, el cual completa 11 años sin ser aclarado.
Monseñor Duarte Cancino fue asesinado por dos sicarios el sábado 16 de marzo de 2002, a la edad de 63 años, minutos después de haber oficiado un gran matrimonio colectivo de más de cien parejas de la ciudad de Cali, en la Iglesia del Buen Pastor en el Distrito de Aguablanca.
El pasado 15 de marzo, un día antes de cumplirse once años la fatidica noche en que Monseñor Duarte Cancino fue acribillado a balazos, el Tribunal Superior de Cali dejó sin validez la condena a 25 años de prisión y $1.000 millones de indemnización, impuesta al secretariado de las Farc por el magnicidio.
La sala penal del Tribunal, con dos votos a favor y uno en contra, desestimó las evidencias más importantes del caso, entre ellas el testimonio de tres desmovilizados y el conductor de monseñor.
Por ello, fueron absueltos los cabecillas de las Farc Alfonso Cano, Timochenko, Efraín Guzmán, Pablo Catatumbo e Iván Márquez. Este último encabeza las negociaciones de paz que se adelantan en La Habana, Cuba.

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