El líder guerrillero, Andrés Paris, dijo que la incorporación de las Farc a la vida política del país debe afrontar garantías que surjan directamente, y agregó que la agenda del diálogo “incluye precisamente ensanchar las posibilidades democráticas para que fuerzas de izquierda representantes del pueblo puedan hacer presencia en la vida política nacional”.
Paris indicó, que al parecer de las Farc son necesarios cambios y reformas en la institucionalidad política de la nación suramericana, sumida en décadas de conflicto armado.
“Por lo menos en la mesa debe expresarse la voluntad oficial de avanzar en esa dirección, con el sólo compromiso de que va anunciar cambios y modificaciones se crearía un ambiente favorable al estudio de fórmulas que permitan a las FARC-EP encontrar los caminos de la participación” señaló el insurgente.
Para París, “los síntomas de apertura deben darse en esta etapa de la discusión de la agenda”.
“No nos puede invitar nadie a participar de la vida política colombiana con el simple acto de una desmovilización y entrega de armas, para nosotros eso no es garantía perdurable, fijamos mayormente la atención en que en la etapa de acuerdos con el Gobierno se nos hable de esas reformas”, dijo.
Señaló que sin esas garantías, es utópico pensar que una fuerza guerrillera con 50 años de lucha va a expresarse y encontrar facilidades de manifestarse en el escenario público.
París recordó lo ocurrido en los años 80 del siglo pasado con la Unión Patriótica, organización surgida con varios actores sociales, entre ellos guerrilleros desmovilizados, que sufrió el asesinato de miles de sus miembros por grupos paramilitares, fundamentalmente.
Las fuerzas que asesinaron y acabaron a la Unión Patriótica están vivas, antes eran miserables sicarios, y hoy muchos de ellos tienen expresión política, lo cual vimos durante los períodos de Gobierno de Álvaro Uribe (2002-2010), advirtió.
Al referirse a la mesa de pláticas que mañana se reanuda en esta capital, el guerrillero destacó los avances alcanzados en la primera ronda, sobre todo en lo relacionado con la participación ciudadana en el proceso de paz.