BOGOTA, 21 de Noviembre _RAM_ El alcalde Gustavo Petro manifestó su profundo rechazo por la visita de la Superintendencia de Industria y Comercio a la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB) este miércoles. El burgomaestre capitalino escribió a través de su cuenta de Twitter que fue «allanada» la entidad por parte del Gobierno Nacional.
Esta acción por parte del Gobierno se da luego de que en la mañana de este miércoles la alta consejera presidencial para Bogotá, Gina Parody, advirtiera que las Superintendencia de Servicios, de Industria o la Comisión de Regulación, podrían intervenir la empresa de llegar a violarse la libre competencia o se prestara un inadecuado servicio de aseo a partir del 18 de diciembre.
Frente al “allanamiento”, Petro dijo que prefiere “la destitución inmediata a rendir la bandera de Justicia y Libertad de Bogotá”.
“Los trabajadores del Acueducto y Alcantarillado de Bogotá empiezan a rodear la empresa en su apoyo”, señaló el alcalde Mayor, quien a su vez informó que el despacho de la alcaldía se desplaza a la entidad.
El gerente del Acueducto de Bogotá, Diego Bravo Borda, aclaró, ante versiones de una supuesta negativa por parte de los funcionarios a suministrar información, que no es cierto que la entidad a su cargo se haya negado a entregarla a los representantes de la Superintendencia de Industria y Comercio.
El funcionario expresó que ha dado la instrucción para que se preste todo el apoyo y se entregue la información requerida por la Superintendencia.
Bravo autorizó también la revisión de sus correos corporativos y personales. «A esta hora se presta toda la colaboración a los funcionarios que realizan la visita», indicó.
Petro escribió en esa red social que el “Gobierno Nacional intenta por segunda vez interceptar y conocer las conversaciones personales del alcalde”, y dijo que todo el gabinete queda convocado a permanecer en la empresa de Acueducto.
Frente a la advertencia de Parody con relación a la facultad que tiene el Gobierno de intervenir al Acueducto, Bravo aseguró que las declaraciones “infortunadamente tienen tono amenazante, lo que no es sano para la ciudad. Pero eso es cuestión de estilos. Lo que se debe resaltar, sin embargo, no es eso. Lo remarcable es que no tiene razón. Al contrario de lo que sostuvo, la ley permite restringir la libre competencia, cuando se verifica por parte de la Comisión de Regulación Agua Potable y Saneamiento Básico (CRA), tal como se hizo el año pasado en Bogotá, y se viene haciendo desde hace 24 años, que en ese esquema no es posible extender la cobertura del servicio a la población de menores ingresos”.
El secretario de Gobierno de Bogotá, Guillerno Asprilla, dijo que la consejera no tiene funciones de superintendente. «Parody puede tener opiniones sobre lo que eventualmente pueden hacer otras autoridades pero no tiene facultades para pronunciase sobre eso. La Constitución establece la autonomía plena del Distrito Capital como ente territorial, el alcalde de Bogotá duélale a quien le duela no tiene superior jerárquico”.