Nicaragua confía en que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) le «devuelva» los derechos sobre su plataforma continental en el mar Caribe este lunes, cuando emita su fallo sobre el litigio con Colombia.
El presidente Daniel Ortega emitirá un pronunciamiento a los nicaragüenses y a la comunidad internacional después de que la CIJ emita su veredicto, informó hoy un medio oficialista.
Desde 2007, el Gobierno nicaragüense ha reiterado que «recuperará» unos 50,000 kilómetros cuadrados en el Caribe, administrados por Colombia desde 1928, cuando ambos países firmaron el Tratado Bárcenas-Meneses-Esguerra.
Durante 84 años, Colombia ha ocupado, según expertos nicaragüenses, parte de la plataforma continental geográfica nicaragüense. En 1979, Nicaragua desconoció el tratado bajo el argumento de que el país estaba bajo ocupación militar estadounidense cuando lo firmó.
La geografía de ambos países podría cambiar este lunes con el veredicto de la CIJ. Hasta ahora, Nicaragua no reconoce el límite del meridiano 82 alegado unilateralmente por Colombia, que le deja con 66.1 millas náuticas de zona económica exclusiva.
En un fallo preliminar sobre las objeciones de Colombia a las competencias de la Corte en 2007, ésta reconoció la validez del tratado en cuanto a la soberanía colombiana de San Andrés, Santa Catalina y Providencia, y determinó que no existía un límite en el mar, lo cual derribaba la tesis del país sudamericano.
En su última declaración pública antes del fallo de la Corte, el agente nicaragüense ante la CIJ, Carlos Argüello, dijo que «este límite obviamente no puede favorecer a Colombia en el sentido de dejarnos encerrados».
Tesis colombiana del meridiano 82 desbaratada
Para el jurista internacional Mauricio Herdocia, rector de la American Collage en Managua, es improbable que la CIJ otorgue la razón a Colombia, «porque eso significaría desdecirse de su fallo emitido el 13 de diciembre de 2007».
En aquel momento la CIJ decidió que el Tratado Bárcenas-Meneses-Esguerra era válido únicamente para otorgar a Colombia el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, pero que no delimitaba la frontera entre ambos países.
Herdocia dijo hoy a Efe que, con esa decisión, la CIJ «hundió la teoría del meridiano 82».
El experto añadió que, una vez borrado ese límite fronterizo, la CIJ tenía dos tareas antes de fallar, una con receta previa y otra que necesitaría algo de creatividad.
La primera era establecer el verdadero límite de ambos países. Según Herdocia, esto devolverá a Nicaragua su territorio marítimo, un mínimo de 200 millas náuticas desde sus costas.
Cálculos basados en la jurisprudencia
«Las 200 millas náuticas son inherentes a cada país ribereño, el derecho internacional lo define en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Mar (artículo 76), derecho internacional consuetudinario para el tema de la plataforma continental y la jurisprudencia reiterada de la CIJ», señaló Herdocia.
Colombia tiene su propia plataforma continental, pero además ocupa la de Nicaragua con base en que tiene islas frente al país centroamericano.
La segunda tarea de la CIJ era determinar el nuevo régimen administrativo de las islas colombianas que quedarían en aguas nicaragüenses, al estar dentro de la zona económica exclusiva de Nicaragua (200 millas) y en su plataforma continental.
El experto recordó que Nicaragua propuso a la CIJ enclavar las islas colombianas y darles 12 millas náuticas de mar territorial.
Por su lado, el experto nicaragüense en derecho internacional independiente, Manuel Madriz, dijo hoy a Efe que Nicaragua tiene argumentos sólidos para recuperar su territorio marítimo, uno geográfico y el segundo político.
En el aspecto geográfico, según Madriz, ningún país puede tener dos plataformas continentales.
Colombia tiene la suya en el subcontinente suramericano, pero también ocupa la plataforma de Nicaragua. «Eso te choca visto desde la proporcionalidad», comentó el experto.
Fuente: El Nuevo Diario de Nicaragua