El aspirante presidencial republicano en EE.UU., Mitt Romney, defendió hoy sus polémicos comentarios en los que tildó de «víctimas» y «dependientes del Gobierno» a los votantes del presidente Barack Obama, y dijo que su intención fue destacar la «gran brecha» entre su visión y la del mandatario.
«Nosotros creemos en las personas libres y en la libre empresa, no en la redistribución», indicó Romney a la cadena Fox News en la primera entrevista concedida tras la controversia suscitada por sus comentarios.
Según Romney, él y Obama tienen «dos puntos de vista muy diferentes» sobre Estados Unidos, un país en el que «el Gobierno juega un papel cada vez más grande y redistribuye la riqueza», algo que va «por el camino equivocado».
«Eso no va a construir un Estados Unidos fuerte o ayudar a la población a salir de la pobreza. Creo que el camino correcto es uno donde el Gobierno interviene para ayudar a aquellos que lo necesitan«, argumentó el candidato.
Los demócratas y Obama, que buscará la reelección el 6 de noviembre, «creen que hay que tomar de unos y dar a otros. Yo no creo en eso», insistió.
Romney defendió así, sin disculparse en ningún momento, sus polémicas declaraciones recogidas en un vídeo grabado de forma furtiva en una cena privada con donantes el pasado 17 de mayo en Boca Ratón (Florida) y que fue divulgado en la web de la revista Mother Jones, de tendencia izquierdista.
En el vídeo se ve a un Romney relajado comentando que un 47 % de los estadounidenses votarán en noviembre por Obama porque «creen que son víctimas, que el Gobierno tiene la responsabilidad de cuidar de ellos, que tienen derecho a salud, alimentación, vivienda o como lo quieran llamar».
«Mi trabajo no es preocuparme por esas personas. Nunca los convenceré de que deberían asumir su responsabilidad y preocuparse de sus vidas», anota Romney, para quien ese 47 % que apoyará a Obama son aquellos que no pagan impuestos a la renta.
Su propósito de dejar atrás su imagen de hombre rico ajeno a las preocupaciones del ciudadano medio queda seriamente cuestionado tras estas declaraciones, según coinciden hoy analistas y medios, y los más inclinados a la izquierda opinan incluso que ya ha perdido las elecciones.
Tras el revuelo suscitado, Romney convocó una conferencia de prensa el lunes por la noche en California y argumentó que sus ideas «no fueron expuestas de manera muy elegante» porque estaba «hablando de manera coloquial», pero tampoco se disculpó.
«Los estadounidenses están cayendo en la pobreza bajo este presidente. Quiero que vuelvan a trabajar», subrayó hoy Romney en Fox News.
Con respecto a las personas que no pagan impuestos, muchos de los cuales son ancianos o están por debajo de la línea de la pobreza, indicó que en EE.UU. debería haber «suficientes puestos de trabajo para que la población tuviera el privilegio de tener mayores ingresos que les permitirían pagar impuestos».