Un juzgado de Bogotá profirió medida de aseguramiento domiciliario en contra del exdirector del Hospital Meissen, Carlos Lizcano; a la exdirectora administrativa , Marlene Sierra; y a la contratista Blanca Dora Reyes, por su responsabilidad en el multimillonario desfalco que sufrió la entidad de salud durante la administración de Lizcano.
De acuerdo con la juez 4 de garantías, Lizcano, Sierra y Reyes, serían responsables de los cuantiosos gastos que llevaron al borde de la quiebra al centro médico que presta sus servicios en Ciudad Bolívar.
Según la imputación hecha por la Fiscalía, los exfuncionarios y la excontratista habrían apropiado de dineros del Distrito.
Por los mismos hechos están siendo procesados el ex gerente del centro hospitalario, Carlos Lizcano, lo mismo que el médico José Félix Restrepo y el empresario Julio Gómez Doncel, padre del contratista Julio Gómez, enjuiciado por el carrusel de la contratación y quien no se presentó a la diligencia judicial argumentando problemas de salud.
Como se sabe en el hospital Meissen se gastaron cuantiosos recursos en la compra de alimentos exóticos, que por supuesto no eran para los pacientes, tales como langostinos, tocino, costillas de ternera, merluza, queso amarillo fino y botellas de vino. Además se pagaron sobrecostos en algunos productos. Por ejemplo, unidad de huevo fue comprada a 380 pesos y la libra de café a 17.000 pesos.
Igualmente se estableció que por cada 10 kilómetros que recorría un vehículo, facturaba un consumo de combustible de 6,2 galones de gasolina.