Carlos Valdés, director de Medicina Legal, inició su intervención en el Congreso anunciando que en Colombia, en los últimos cinco años, han asesinado a 6.013 mujeres por parte de sus parejas, exparejas y familiares.
En el país, generalmente, las asesinan en la casa y en el lugar de trabajo, entre las 6:00 de la tarde y las 8:00 de la noche, especialmente los domingos.
“El panorama es dramático. Está relacionado con la violencia intrafamiliar y la violencia sexual. La muerte no es fortuita, sino que obedece a una serie de actos consecutivos, relacionada con una relación enfermiza”, explicó Valdés.
Por esto, el director dijo que crearon un programa, el cual arrojó que entre enero y agosto de este año 2.127 mujeres están siendo declaradas en riesgo extremo, 1.340 en riesgo grave y 1.547 en riesgo moderado.
Valdés contó que los principales traumas que ven en los cadáveres de mujeres, antes de ser asesinadas, son en el cráneo, cara y en el tórax. “El panorama es desolador, ha incrementado la violencia a la mujer en el último año en un 8.5%”.
Sin embargo, la realidad más cruda del instituto es que trabajan prácticamente con las uñas y por eso es que el director volvió a hacer una crítica en materia de presupuesto.
“No quiero seguir constituyéndome en notario. El instituto asume el deber que tiene. Este instituto ha sido desconocido y es la institución más pobre que tiene el país”, sentenció.