El Presidente Juan Manuel Santos les pidió perdón este miércoles a las comunidades indígenas del departamento del Cauca por las víctimas que han sufrido durante muchos años por el conflicto armado.
Durante su reunión con los líderes de las comunidades en Piendamó, el Mandatario subrayó que éste Gobierno no considera a los indígenas del Cauca como guerrilleros.
«Pedirles perdón y al mismo tiempo pedirles que trabajemos juntos para que eso deje de suceder y no suceda nunca más», sostuvo.
En el encuentro del resguardo de la María, los indígenas presentaron sus necesidades sobre la seguridad de sus territorios.
La comunidad insistió en que el gobierno nacional debe darles las garantías plenas a la guardia indígena para el control del territorio, también rechazaron la actitud «guerrerista» de los actores armados, y también hicieron denuncias sobre el comportamiento de policías y soldados en su territorio.
El gobierno, sin embargo, ha dicho que la presencia del Estado no desaparecerá de ninguna región del país.
Sobre las exigencias para mejorar por ejemplo los problemas de salud y educación, Santos habló de la conformación de cinco mesas de trabajo entre voceros de los indígenas y funcionarios del gobierno que, un lapso de dos meses, deberían empezar a mostrar resultados. «Aquí lo que escucho (en Cauca) es el anhelo de terminar este conflicto que tanta sangre nos ha costado y tantos muertos».
El mandatario aseguró que las comunidades tienen razón cuando dicen estar hastiadas de la guerra y calificó como una equivocación el que a los indígenas se les quiera estigmatizar por sus supuestos vínculos con grupos al margen de la ley.
«Yo no considero ni he considerado… a las comunidades, y menos a los del Cauca, como guerrilleros o portadores de violencia. Esa estigmatización la rechazamos y la rechazo yo», enfatizó Santos, quien calificó esa generalización como un «error (en el que) no voy a incurrir, porque abre heridas en vez de cerrarlas».
Durante su extensa intervención, el presidente les habló a los indígenas de sus derechos y deberes porque, según dijo, su gobierno respeta los derechos de las comunidades indígenas y también los de los otros 46 millones de colombianos.
«Aquí hay un presidente amigo, un presidente que los respeta, un presidente que los quiere ayudar y también un presidente que tiene que hacer respetar los derechos de los demás colombianos… (Aquí) hay también 46 millones de colombianos que también reclaman…, que también exigen», dijo.
Finalmente reiteró que quisiera ser recordado como el presidente que logró la paz para Colombia. Si eso sucede, dijo, «moriría tranquilo, entusiasmado».
Los líderes indígenas nasa habían alistado un vasto paquete de demandas para la reunión del miércoles con Santos, entre las que destacaron autorizar diálogos regionales de paz y la desmilitarización de lo que consideran sus territorios sagrados.
En ese resguardo se congregaron desde la semana pasada al menos 12.000 indígenas, dijo telefónicamente James Yatacué, presidente de la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca.
La reunión de la jornada se produjo luego de que el domingo los líderes nasa se levantaran de una mesa de negociaciones, establecida con delegados del gobierno el 23 de julio, alegando que los ministros asistentes carecían de autoridad para decidir temas como el de la presencia de la fuerza pública en los territorios del norte del departamento de Cauca, donde habitan al menos 115.000 nasa.
Santos, que a través de sus delegados rehusó en varias ocasiones la cita, accedió la víspera a reunirse con los indígenas en busca de cesar los reclamos, que se reavivaron a mediados de julio tras una serie de ataques de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) a poblados del norte de Cauca, una zona del suroeste colombiano clave porque da acceso tanto a la costa del Pacífico como a regiones del centro del país.
El mandatario también ha insistido que sólo él maneja el tema de los diálogos con la insurgencia y que sólo cuando este convencido de la voluntad de paz de las FARC, de que dejarán las armas y cesarán sus acciones armadas, consideraría establecer una negociación.
ONU destaca diálogos entre gobierno de Santos e indígenas
BOGOTA, 15 de Agosto_ RAM_.... La Organización de Naciones Unidas resaltó este miércoles el consenso logrado por el ministro del Interior de Colombia, Federico Renjifo, con las comunidades indígenas del norte del departamento del Cauca.
“Yo creo que el ministro (del Interior, Federico Renjifo) logró construir un nivel de sinceridad y confianza, donde se ganó este tipo de respeto por parte de las comunidades indígenas”, destacó este miércoles Bruno Moro, representante Residente del programa de Naciones Unidas para el Desarrollo –PNUD-.
El funcionario indicó que Renjifo logró transmitir “legitimidad y credibilidad” como delegado del presidente Juan Manuel Santos para las conversaciones con estas comunidades. Renjifo “asume su misión más allá de ocupar un cargo oficial”, enfatizó.
A su turno, el también delegado de la ONU en Colombia pero para los Derechos Humanos, Todd Howland, resaltó los “resultados concretos” de las conversaciones.
Howland destacó el trabajo del ministro Renjifo. “Ha sido fundamental para crear confianza, que es el punto de partida para poder avanzar, lo cual hoy permite que el Presidente Santos haya llegado hasta el resguardo indígena”.
“Estamos viendo que hay colaboración entre la policía y la Guardia Indígena. Entonces, podemos ver que hay confianza y que hay un proceso en construcción. Hay unos datos concretos de hoy, que son producto de los diálogos de varias semanas, entonces en la ONU vemos de manera muy positiva estos resultados”, enfatizó.
El pasado 18 de julio, el Presidente de la República encomendó a su ministro del Interior la tarea de liderar las negociaciones con las comunidades indígenas del norte del Cauca. Renjifo inició dichas negociaciones cinco días después en el municipio de Santander de Quilichao.
Desde esa ocasión, mantuvo más de cinco reuniones de acercamiento con los dirigentes indígenas en Cali, Popayán y en el resguardo indígena de ‘La María’.