Un caluroso homenaje le tributó Bogotá a los medallistas olímpicos, encabezados por la niña de oro Mariana Pajón, que a bordo de un carro del cuerpo de bomberos recorrieron las calles de la capital hasta la Plaza de Bolívar.
La caravana se inició en la sede del Comité Olímpico Colombiano, ubicada en la avenida 68, frente al Parque simón Bolívar y tomó la calle 63 hasta la carrera 50 y de allí siguió hasta a la calle 26 por donde subió a la carrera séptima y dirigirse a la Plaza de Bolívar.
Posteriormente los deportistas ingresaron a la Casa de Nariño, donde el presidente Juan Manuel los recibió como héroes, con tapete rojo, porque, destacó, “dejaron muy en alto el nombre de Colombia” y rompieron todos los récords”.
En un acto cumplido en la plaza de armas del palacio presidencial, el jefe del Estado les impuso sendas condecoraciones y les agradeció lo hecho por Colombia en los Olímpicos de Londres.
Sólo estuvo ausente el ciclista Rigoberto Urán, quien se quedó en Europa para intervenir en varias pruebas internacionales.
El primer mandatario anunció nuevos proyectos deportivos, y estimulos para que los colombianos sigan el ejemplo de los medallistas olímpicos, tras citar a cada uno de ellos y destacar sus antecedentes personales y sus valores deportivos.
En el caso de Mariana Pajón, quien obtuvo la única medalla de oro en esta edición olímpica, el presidente Santos anunció “la construcción de la mejor pista de bicicross de América Latina en su tierra natal”.
Para cristalizar la obra le pidió a Mariana asesorar a los organismos competentes.
En su intervención, el Presidente Juan Manuel Santos consideró que más allá de los logros deportivos, lo que nuestros atletas hicieron en los Juegos Olímpicos de Londres fue darnos un gran ejemplo a los colombianos y recordarnos lo importante que es la unidad para un país.