Robert Mueller, nombrado fiscal especial para investigar la presunta injerencia rusa en la campaña electoral de Estados Unidos de 2016, comenzó las pesquisas para determinar si el presidente Donald Trump intentó obstruir la justicia en el sonado caso ruso, tras el despido del exdirector del FBI James Comey.
Así lo aseguró este miércoles The Washington Post que, citanto fuentes anónimas, señaló que altos funcionarios de inteligencia aceptaron ser entrevistados por investigadores que están trabajando con el fiscal especial, Robert Mueller.
Entre ellos figuran el director nacional de Inteligencia, Daniel Coats; el jefe de la Agencia Nacional de Seguridad, Mike Rogers, así como quien fuera hasta hace poco su adjunto, Richard Ledgett. Las entrevistas podrían realizarse esta misma semana, agregó el diario.
El giro en la investigación para indagar al presidente se produjo poco después de que Trump despidiera intempestivamente el 9 de mayo aJames Comey como jefe del FBI, dijo el Post.
Citando a funcionarios, el diario indicó que uno de los asuntos de interés de Mueller es un intercambio que tuvo lugar el 22 de mayo, cuando Coats dijo a sus asociados que Trump le había pedido que interviniera para que Comey dejara de investigar a su ex asesor de seguridad Mike Flynn en el marco de la pesquisa del FBI sobre la injerencia rusa.
El mandatario niega que haya habido colusión entre él o alguno de sus allegados y Rusia.