El presidente Santos irá a esta población históricamente azotada por la violencia para adelantar un consejo de ministros e intentar dejar planteada una solución definitiva y que evite que se presenten nuevos ataques en esta zona del país.
Se espera que el jefe de Estado, aparte de evaluar con las fuerzas militares una nueva estrategia para proteger a la población y replegar de manera más efectiva a la guerrilla, anuncie la creación de una nueva fuerza de tarea conjunta.
Así mismo, un plan de consolidación para que se comiencen a invertir recursos que impulsen el desarrollo agrícola y programas sociales en la zona para evitar que la población civil colabore con la guerrilla.
Además se busca que los habitantes que tengan métodos de financiación propios y evite seguir trabajando en procesamiento de coca o cultivos de marihuana.