El presidente de E.U., Barack Obama, compareció este domingo en una rueda de prensa y descartó enviar tropas de su país para combatir sobre el terreno al Estado Islámico en Irak o Siria.
“No deberíamos implicarnos una vez más en una guerra sobre el terreno larga y costosa en Irak o Siria, subrayó Obama en un inusual discurso televisado a la nación desde el Despacho Oval de la Casa Blanca en horario de máxima audiencia.
Obama, subrayó además que el grupo yihadista Estado Islámico “no habla en nombre del Islam” y prometió su destrucción, apelando a que “la libertad es más poderosa que el miedo”.
Obama calificó a los miembros del EI como “matones y asesinos” que forman parte “de un culto a la muerte”, y llamó a no confundir a los radicales con el resto de musulmanes, quienes -advirtió- también sufren sus atrocidades.
El presidente estadounidense insistió en que los yihadistas “sólo representan una pequeña fracción de más de mil millones de musulmanes en todo el mundo”, incluyendo a millones de “patriotas estadounidenses musulmanes que rechazan su ideología de odio”.
En este sentido, Obama advirtió de que, para tener éxito en la lucha contra el EI, es necesario contar con las comunidades musulmanas como “los aliados más fuertes”, en lugar de desdeñarlos con “la sospecha y el odio”.
Para ello, remarcó, los líderes musulmanes de todo el mundo “tienen que seguir trabajando” para rechazar con decisión y de manera “inequívoca” la ideología de odio que grupos terroristas como el EI y Al Qaeda han promovido.
“La amenaza del terrorismo es real, pero vamos a superarlo. Vamos a destruir al EI y a cualquier otra organización que trate de hacernos daño”, aseveró el mandatario.
EFE