El tema de la paz fue el eje de la reunión que el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, mantuvo en Bogotá con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, que incluyó además un repaso de los diferentes asuntos de la amplia agenda bilateral.
En una declaración a la prensa junto con Santos después de la reunión, Kerry manifestó la esperanza de Washington de que los diálogos de paz del Gobierno colombiano con la guerrilla de las Farc, que desde hace dos años se celebran en Cuba, sean acelerados porque «el tiempo apremia» y para «que 2015 sea el año de esa paz».
«Una de las cosas que comentamos es cómo podemos construir desde ahora esa nueva época del postconflicto. Estas negociaciones que se están llevando a cabo significan que podemos construir oportunidades e instituciones que no existirían de no ser así», dijo Kerry.
Por su parte, Santos manifestó que la consecución de la paz sería «el cierre con broche de oro» de la cooperación con Estados Unidos «y será también la plataforma y la base para poder continuar estas relaciones en el postconflicto de una manera muy proactiva y beneficiosa para los dos países».
Estados Unidos ha sido históricamente el principal aliado de Colombia en la lucha contra los grupos guerrilleros y carteles de la droga, principalmente con ayuda militar que desde 2002 se canaliza por medio del Plan Colombia, pero con la posibilidad de la paz se busca ampliar esa cooperación a otros ámbitos.
«Estamos ayudando a construir los cimientos fundamentales de un futuro postconflicto mediante el sector de justicia, que es donde estamos proporcionando apoyo, la reforma agraria, los esfuerzos antinarcóticos, un desarrollo sostenible y la desmovilización de los combatientes», manifestó el secretario de Estado.
Kerry, que reiteró el apoyo de la administración del presidente estadounidense, Barack Obama, a los esfuerzos de paz de Santos, aseguró que Washington está dando los pasos necesarios «para fortalecer la reconciliación y la reintegración (de desmovilizados) en su programa con el Gobierno colombiano».
«Los Estados Unidos apoyarán incansablemente a Colombia para llegar a una paz negociada», dijo el funcionario, quien reconoció sin embargo «que esto no es fácil» porque siempre hay sectores «críticos» que se oponen a estos procesos y que quieren «retroceder».
Antes de encontrarse con Santos y con su canciller, María Ángela Holguín, Kerry conversó con el jefe del equipo negociador de paz del Gobierno colombiano, Humberto de la Calle, y con el alto comisionado de Paz, Sergio Jaramillo, quienes viajaron a Bogotá desde Cuba donde actualmente se lleva a cabo el ciclo 31 de los diálogos.
«Nos pusimos tareas qué hacer y vamos a regresar a casa a hacerlas y le garantizo que vamos a regresar con ideas sobre cómo hacer que este proceso siga adelante», dijo a Santos el funcionario estadounidense, quien calificó el encuentro con los negociadores como «sumamente productivo».
Agregó que en esta relación no sólo es Estados Unidos el que aporta sino que Colombia también hace su parte, especialmente en materia de seguridad, aspecto en el que es gran aliado regional de Washington.
«Colombia se ha convertido en el socio más capaz a nivel de seguridad en esta región», expresó Kerry, quien destacó que entre 2009 y este año el país suramericano ha entrenado a unos 22.000 policías de más de 60 países, un compromiso que, añadió, el presidente Obama agradece.
Esa cooperación, que el Gobierno colombiano enmarca en una estrategia denominada «diplomacia para la seguridad» es, según Kerry, «una prueba de la capacidad de Colombia para mejorar su propia seguridad y su propio futuro».
Kerry y Santos coincidieron además en que las negociaciones de paz son una oportunidad única para poner fin al conflicto de medio siglo en Colombia y el presidente aseguró que el país tiene «que aprovechar estas condiciones y en este sentido la ayuda de Estados Unidos es fundamental».
EFE