Al Ministro de Interior, Juan Fernando Cristo, le ha ido como «perro en misa» en el manejo de las relaciones políticas con los congresistas. Muchos de ellos aseguran que no es un interlocutor válido ni con poder. Al parecer le salió competencia en Palacio de Nariño. Se trata nada menos que del vicepresidente Germán Vargas y el super Ministro Néstor Humberto Martínez, quien maneja el famoso computador de la Casa de Nariño. Estos dos altos funcionarios manejan directamente las relaciones políticas con los congresistas y han dejado sin ningún poder ni manejo al ministro Cristo. Y ahí es donde radica el disgusto del partido de la U y de los Liberales que sienten a Cristo los ha dejado solos y que sus colegas de Cambio radical han salido beneficiados por cuenta de Vargas LLeras y Martínez.