El papa Francisco expresó su «profundo dolor» por el atentado contra la mezquita de la ciudad nigeriana de Kano, que causó la muerte de cerca de un centenar de personas y que condenó al calificarlo de «inhumano e insensato».
Lo hizo durante su participación en la divina liturgia ortodoxa de San Andrés, en Estambul, durante el viaje que ha realizado a Turquía en los últimos tres días y que concluye hoy.
Durante su intervención, el papa señaló que una de las voces que clama con vehemencia en la actualidad es «la de las víctimas de los conflictos en muchas partes del mundo».
«Esta voz la oímos resonar muy bien desde aquí (Estambul), porque algunos países vecinos están sufriendo una guerra atroz e inhumana», lamentó.
Fue entonces cuando se refirió al atentado a la mezquita de Kano, que se sospecha que ha sido obra de los yihadistas de Boko Haram si bien estos aún no han reivindicado su autoría.
«Pienso con profundo dolor en las tantas víctimas del inhumano e insensato atentado que en estos días han sufrido los fieles musulmanes que rezaban en la mezquita de Kano, en Nigeria», señaló el pontífice.
En este sentido calificó de «grave pecado contra Dios» el hecho de «turbar la paz de un pueblo, cometer o consentir cualquier tipo de violencia, especialmente contra los más débiles e indefensos» porque eso, a juicio del pontífice, «significa no respetar la imagen de Dios que hay en el hombre».
«La voz de las víctimas de los conflictos nos impulsa a avanzar diligentemente por el camino de la reconciliación y comunión entre católicos y ortodoxos ¿Cómo podemos anunciar de modo creíble el Evangelio de paz que viene de Cristo si entre nosotros continúa habiendo rivalidades y contiendas», defendió Francisco.
El papa argentino concluye este domingo su periplo por Turquía, donde ha visitado su capital, Ankara, durante una jornada esencialmente política, y posteriormente Estambul, donde ha llevado a cabo actos de carácter ecuménico y destinados a contribuir al diálogo interreligioso.