Continúan las labores tras el desbordamiento de dos quebradas en el municipio de Fusagasugá (Cundinamarca), que dejó una persona muerta, 575 daminificados y 131 viviendas completamente destruidas.
Por eso, se declaró Calamidad Pública, para que así se pueda actuar con mayor prontitud en la ayuda de los afectados por esta tragedia natural que se presentó el pasado jueves, con dineros nacionales y departamentales.
El Gobernador de Cundinamarca Álvaro Cruz realizó un sobrevuelo en la mañana del sábado y aseguró que ya se están atendiendo a los daminificados, con los primeros aportes en maquinaria para solucionar el tema de la viviendas en las próximas horas de aquellos que lo perdieron todo.
Además, se creó un equipo de profesionales de la Defensoría del Pueblo crearon un Puesto de Mando Unificado para solucionar las afectaciones por la inundación causada ante el desbordamiento de las quebradas La Parroquia y El Arrastradero.
Dicho equipo presta apoyo y acompañamiento a los damnificados por la inundación ocurrida el jueves en el centro y la avenida Las Palmas de ese municipio.
Se definió la entrega de ayudas a las 26 familias que fueron censadas como damnificadas tras el desbordamiento de las quebradas.