Venezuela ha decidido llamar a consultas a su embajador en España «en el marco del proceso de revisión integral» de sus relaciones diplomáticas como consecuencia de las declaraciones «injerencistas» del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, informó hoy el Ministerio venezolano de Exteriores.
El Gobierno de Nicolás Maduro «ha decidido llamar a consulta al embajador de la República Bolivariana de Venezuela acreditado en el Reino de España, a partir de la presente fecha», señaló en un breve comunicado la cancillería venezolana.
La decisión forma parte «del proceso de revisión integral de las relaciones diplomáticas, como consecuencia de las declaraciones injerencistas del jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy», agregó la nota.
El presidente venezolano anunció el pasado viernes que había ordenado al Ministerio de Exteriores una revisión global» de las relaciones con España después de que Rajoy, se pronunciara sobre el caso del opositor venezolano Leopoldo López, preso desde hace ocho meses por su relación con una protesta antigubernamental que acabó en violencia a principios de año.
El jefe del Gobierno español se reunió con la esposa del opositor venezolano, Lilian Tintori, a quien manifestó su preocupación y la de la Unión Europea por el juicio que se sigue a López.
Rajoy expresó su preocupación por las condiciones en las que se pueda desarrollar el juicio, así como la necesidad de respetar la libertad de expresión y el derecho de manifestarse pacíficamente en Venezuela.
Maduro calificó la actitud del presidente de Rajoy con respecto a ese caso como un acto «inamistoso, de injerencismo y de apoyo a los grupos de ultraderecha que ejercen la violencia en Venezuela».
«Tenemos que hacernos respetar, porque a nosotros nos ven como los menos. Rajoy cree que él es rey, todavía, y dueño de América y que nosotros tenemos que obedecerle», dijo.
Esta es la segunda vez desde que Maduro accedió a la presidencia que Venezuela llama a consultas a su embajador en España. La misma decisión se adoptó en abril de 2013 después de que el Gobierno español dijera que tomaba «nota» de la victoria de Maduro en los comicios del 14 de abril y abogase por un recuento electoral.
Entonces, Nicolás Maduro decidió llamar a consultas al embajador de Caracas en Madrid y pidió una rectificación.
La tensión se suavizó posteriormente con un encuentro en la capital española entre los cancilleres de ambos países, aunque se reavivó tres meses después, cuando Maduro decidió someter a examen las relaciones con España tras un incidente que sufrió el avión del presidente de Bolivia, Evo Morales, durante un tránsito por Europa.
EFE