En un ballotage histórico en el cual se impuso por un estrechísimo margen la actual presidente Dilma Rousseff, puede observarse cómo el propio Brasil se polarizó si se tiene en cuenta el mapa que muestra qué regiones votó por cada uno de los candidatos.
A simple vista, puede observarse cómo Rousseff -quien obtuvo más del 51 por ciento de los votos- se alzó con la mayoría absoluta de los votos de la región Norte y Noreste del gigante latinoamericano. Fue en esos estados -la mayoría con amplios margen de pobreza entre su población- donde Rousseff sacó una ventaja mayor contra el candidato de centro Aécio Neves, quien obtuvo poco más del 48 por ciento de los votos emitidos.
El candidato del PSDB, quien sorprendió en primera vuelta al colocarse muy cerca de la presidente Rousseff se vio triunfador en el Sur y Sureste, donde se concentran los estados más ricos del país. Salvo Río de Janeiro, Aécio ganó en los restantes estados de esa mitad del país.