Bloqueadas diez vías nacionales por invierno

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La alerta roja en los departamentos de Norte de Santander y Casanare, así como la naranja en Boyacá y Santander se mantiene a raíz de las fuertes lluvias y desbordamientos registrados en estas regiones del oriente del país a causa de la actual ola invernal.

El pronóstico de amenaza moderada por deslizamientos de tierra se mantiene en 15 municipios de Norte de Santander, entre ellos la capital Cúcuta, mientras que en Santander la amenaza es baja a moderada por ese mismo riesgo de avalancha.

En este último departamento, los municipios de Capitanejo y Málaga han sido los más afectados registrando cerca de 300 familias afectadas por inundaciones y crecientes de los río aledaños.

El alcalde de Capitanejo, Isidro Mogollón Blanco, aseguró que la situación es tan preocupante que aún no se ha podido estimar con exactitud las pérdidas en su municipio, porque hay veredas y corregimientos totalmente bloqueados.

En el departamento de Boyacá, la amenaza es de moderada a baja por posibles deslizamientos de tierra a causa de las lluvias, las mismas que provocaron el desbordamiento del río Teatinos en Jenesano (a 30 Km. de la capital, Tunja.), uno de los municipios más afectados de la región por el invierno.

La población boyacense se mantiene sin agua, sin luz y sin gas domiciliario desde hace tres días, mientras que el vecino municipio de Samacá registra cerca de 1000 hectáreas de cultivos arrasados por la creciente del río Gachaneca. Alrededor de 600 personas resultaron damnificadas con esta última emergencia.

Tunja por su parte terminará pronto de normalizar el suministro de agua potable en la mayoría de sus barrios, tras estar suspendido desde el domingo en la noche luego de los daños en sus acueductos, causados por deslizamientos de tierra.

El Ideam mantiene así mismo la alerta roja sobre 10 municipios del departamento de Casanare, entre ellos su capital Yopal, en donde se pronostica amenaza alta por deslizamientos de tierra detonados por lluvias. En la capital casanareña se encuentra suspendido el servicio de agua, pues la creciente del río Cravo Sur se llevó la tubería que transporta el líquido.

Por si fuera poco, los habitantes de Yopal tampoco cuentan con gas domiciliario porque la tubería que lleva ese servicio quedó expuesta con los derrumbes presentados recientemente en medio de las crecientes y fuertes lluvias.

Los estragos causan el cierre de diez vías nacionales

De acuerdo con el más reciente reporte de la Policía Nacional de Carreteras, diez vías nacionales en siete departamentos del país presentan cierre total.

En el departamento de Antioquia, son dos los pasos bloqueados, en la vía Medellín – La Pintada, sector Chirapoto, por caída de piedra y lodo y en la carretera La Mansa – Ciudad Bolívar, en la zona conocida como La Balastrera, por deslizamiento de lodo y tierra.

La Policía de Carreteras ha recomendado las vías Medellín-Doradal- Honda, como paso alterno al bloqueo en Chirapoto y la ruta Medellín-Amaga-Venecia como alternativa a la restricción en La Balastrera.

En el departamento de Norte de Santander se reporta el cierre de la carretera que lleva de Pamplona a Bucaramanga, en el sector de El Oasis, por pérdida de la banca, siendo la alternativa de paso, la vía Cúcuta-El Zulia-Ocaña- Pamplona.

Boyacá por su parte, uno de los departamentos más golpeados por el invierno en las últimas horas, registra el cierre de cuatro de sus vías de carácter nacional, a causa de deslizamientos de tierra.

Se trata de la carretera Bogotá – Tunja, en el sector Runta (Km. 118), siendo la variante Tunja la vía alterna; la carretera Soatá – Tipacoque, en Puente Roto (Km. 3), sin paso alterno; la ruta Sogamoso- Pajarito, sector El Tobogán (Km. 83), con la alternativa de cruce en la vía Sisga-Guateque-Santa María; y el paso entre Chiquinquirá y Tunja (Km. 46), en Villa Rosita, siendo la carretera Arcabuco-Barbosa-Chiquinquirá, la carretera alterna para el paso.

Los demás cierres viales nacionales se presentan en las carretera Dorada – Puerto Boyacá (Km. 53), por escape de gas en un poliducto de Ecopetrol; la ruta La Cabuya-Saravena (Km. 14), en el departamento de Arauca, por la caída de un puente; y la vía Candelaria-La Plata-Laberinto (Km. 96), en el departamento del Huila, por obras de rehabilitación y mantenimiento del puente El Colegio, la zona afectada.

Cambia la estructura de gestión de riesgo

El presidente, Juan Manuel Santos, sancionó la Ley que adopta la Política Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, con la cual, según el mismo mandatario, las entidades gubernamentales de ahora en adelante no sólo se limitarán a atender las consecuencias de los desastres naturales, sino también a prevenir un alto porcentaje de riesgos.

“Esta Ley de Gestión del Riesgo de Desastres nos va a permitir contar con todo un sistema articulado y organizado para trabajar, como su nombre lo indica, en la reducción del riesgo en el país. Por primera vez en la historia de Colombia, contaremos con una política pública enfocada en el conocimiento y en la prevención de los posibles desastres que vengan de aquí en adelante”, señaló el mandatario este martes, al sancionar la citada Ley.

Santos explicó que con esta ley se crea una nueva estructura que reunirá todas las entidades que trabajan en el tema de la prevención y atención de emergencias o desastres, para conformar así “un único sistema que se movilizará cada vez que sea necesario”.

Con la firma de esta normatividad el Ejecutivo Nacional contará ahora con nuevas herramientas para tomar determinaciones en momentos oportunos y ejecutar presupuestos para atender las emergencias que sean necesarias.

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