Tres miradas para entender al Estado islámico

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Los atentados perpetuados en París y las diferentes amenazas que tienen en alerta a los principales países de occidente, han sido atribuidos al EI. Entienda al grupo islamista desde diferentes ángulos.

Historia

Al morir el profeta Mahoma en el año 632 d.c, se generó una controversia sobre quién debía ser el sucesor. Por un lado una facción, que más tarde se denominaría chiítas, decía que debía ser un descendiente directo de Mahoma, en ese caso el Yerno del profeta. Por otro lado, los denominados sunitas creían que el sucesor debía ser un hombre justo, bueno y estudioso, sin necesidad de pertenecer a la línea hereditaria de Mahoma.

Con los años ambas partes no han llegado a ningún acuerdo, lo que ha hecho que los dos grupos mantuvieran las diferencias a lo largo de la historia, llevando a que en la actualidad los sunitas sean el grupo mayoritario con cerca del 87% del total de los musulmanes y los chiítas la minoría, el 13% del total.

Durante la I Guerra Mundial se creó el Pacto Sykes Picot, el cual consistía en que el ministro de relaciones exteriores británico (Sykes) y el ministro de relaciones exteriores francés (Picot) dividieran el Medio Oriente, el norte para los franceses y el sur para los ingleses.

En medio de estas divisiones han nacido grupos terroristas como Al Qaeda, que tenía una célula que los representaba en Irak, denominada “Estado Islámico de Irak”. Al iniciar la guerra civil en Siria, en el 2011, Al Qaeda envía una facción a esta zona de oriente. Es ahí cuando el Estado Islámico de Irak migra a Siria y funda el denominado “Estado Islámico de Irak y Siria” (ISIS por sus siglas en inglés) sin autorización de su líder, Al Qaeda, que expulsa inmediatamente a ISIS por ello. Con el tiempo, en 2014, Al-Bagdadi líder de la organización terrorista, toma el control de más zonas en Irak, entonces decreta la creación del califato y cambia el nombre a Estado Islámico (EI).

Cuenta Juan Sebastián Brizneda, coautor del libro “Lealtades cruzadas: 9 miradas a Medio Oriente” y quien ha estudiado al Estado Islámico desde su origen, que en el pacto Sykes Picot los países que hoy conocemos como Siria, Irak o Jordania, fueron establecidos de manera arbitraria, un hecho que es tajantemente rechazado por el EI indicando que estás no son la verdaderas fronteras del mundo musulmán.

Pese a que en algún momento el EI controló un territorio más grande que Reino Unido, esto ha venido cambiando, según el experto, el grupo terrorista ha perdido territorio últimamente a mano de las fuerzas kurdas como Kobane y Sijar. Brizneda asegura que uno de los factores más importantes es que dominan Mosul, la segunda ciudad más grande e importante de Irak y en Siria cada vez están más cerca de Damasco, la capital.

Religión

El Islam es la religión de los musulmanes, la misma que profesa el EI y significa “sumisión, paz y obediencia a Dios”. El libro sagrado por el cual establece sus comportamientos es el Corán, en él se encuentran reglamentadas todas las acciones del ser humano, desde cómo vestirse o bañarse, hasta gobernar países en tiempos de paz o en tiempos de guerra.

La cifra de musulmanes en todo el mundo asciende a los 1.600 millones de personas, siendo así la religión con más adeptos y la que más crece diariamente.

El islam tiene unos parámetros establecidos de comportamiento muy similares a otras creencias: tienen un ser supremo, se rigen por un libro sagrado e involucran doctrinas que justifican su existencia en gran medida. No obstante, los recientes atentados de París han llevado a que los musulmanes sean relacionados con ataques terroristas, sin embargo no todos tienen el mismo pensamiento extremista que caracteriza a los miembros del Estado Islámico.

El EI proclama pertenecer al Islam buscando poner la ley sagrada por encima de los hombres para gobernar bajo los mandatos de Dios. Al respecto Carlos Sánchez, imam de la Mezquita de Estambul en Bogotá, recalca el desacuerdo de su religión con los actos perpetuados por el EI y señala que “las acciones que realiza este grupo son una desviación del Islam porque sus actos violentos los justifican con el Corán y la violencia no es aceptada dentro de nuestra religión jamás. Hasta el momento ninguna entidad islámica los ha apoyado”.

Y es que Sánchez, para evidenciar que el grupo terrorista es una minoría frente a los musulmanes, pone como ejemplo los eventos del semanario francés Charlie Hebdo, en París, ocurridos a inicios de este año cuando dos hermanos que pertenecían al EI ingresaron a la sala de redacción del medio y asesinaron a 12 periodistas. “Es claro que fueron dos hermanos, no 1.600 millones de musulmanes”, señala al respecto.

Comunicación

El Estado Islámico tiene como principal arma de difusión las tecnologías de la información y las comunicaciones y están centrados en las redes sociales por su capacidad de expansión. Por medio de las redes han tenido gran acogida de entre varios jóvenes y niñas que han decidido unirse a este grupo terrorista, como es el polémico caso de tres adolescentes inglesas: Shamima Begum, de 15 años, Kadiza Sultana, de 16, y Amira Abase, de 15, quienes escaparon de Reino Unido con destino a Siria.

Su historia alarmó a la comunidad internacional y se convirtió en reflejo de la gran capacidad de influencia del grupo terrorista. Después de todo, al interior de El Estado Islámico las mujeres pierden toda autonomía y aun así las jóvenes decidieron dejar la comodidad de sus hogares.

Al respecto Antonio Alonso González, decano de Marketing y Negocios Internacionales de la Universidad Sergio Arboleda, explica que los videos difundidos por el EI, en donde se observan decapitaciones, destrucción de monumentos históricos o torturas a adultos y niños, utilizan la estrategia del denominado marketing viral, con el que utilizan la emoción del espectador para aprovechar sus sentimiento de ira e indignación para que este comparta los contenidos en sus redes sociales expresando su rechazo. Así los beneficiados son el grupo terrorista, fijando en la sociedad y logrando difusión.

El anonimato, así mismo, es muy bien manejado en la mayoría de los casos por los miembros del EI, frente a esto explica González que “detrás de la incógnita incluso hay más miedo, porque no sabes realmente quien está ahí, no puedes identificarlo, no sabes dónde vive, quienes son sus familiares, incluso creo que esto le da un mayor temor a sus enemigos, el no saber quién está detrás”. Cuenta que, además, entre los métodos de difusión el grupo yihadista utiliza una revista llamada “Dabiq”. En ella renuncian a su idioma nativo utilizando el inglés, un hecho que contradice lo proclamado por ellos, el rechazo a los parámetros occidentales. De esta manera se hace visible que comprenden que el alcance de los mensajes será más amplio y aseguran un reconocimiento internacional mayor que si lo hicieran en árabe.

Las acciones extremistas han caracterizado al Estado Islámico desde su origen, dejando miles de víctimas a su paso y habitantes sometidos en los territorios donde se encuentran su régimen. Afrontar la lucha contra el Estado Islámico llegó hasta el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, se aprobó la resolución francesa relacionada con la lucha contra el terrorismo.

La ONU considera que el Estado Islámico constituye una amenaza sin precedentes para paz y la seguridad mundial, y autoriza utilizar todas las medidas necesarias de acuerdo con el Derecho Internacional en el territorio controlado por este grupo en Siria. También hace un llamamiento a la comunidad internacional para que se unan esfuerzos para prevenir y eliminar los ataques terroristas.

EL ESPECTADOR

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