La guerrilla del autodenominado Ejército de Libración Nacional, Eln, condicionó en las últimas horas la liberación de un contratista canadiense secuestrado a principios del año a que la empresa multinacional para la cual trabaja el plagiado, devuelva “los títulos mineros que sonsacó a las comunidades tradicionales”.
Las precisiones las hizo el reducto guerrillero en un comunicado, en el cual se refiere al geólogo canadiense Jernoc Wobert, quien fue secuestrado junto con 3 colombianos y dos peruanos, a quienes dejó en libertad el pasado 15 de febrero.
El plagio se produjo en la mina de oro “Casa de Barro”, en el municipio de Norosí, ubicado en inmediaciones de la Serranía de San Lucas, al sur del departamento de Bolívar y en la misma zona el grupo guerrillero entregó a los cinco secuestrados una comisión humanitaria encabezada por el Comité Internacional de la Cruz Roja, pero mantuvo bajo cautiverio al canadiense, de 47 años de edad.
En esa oportunidad, el llamado frente Darío Ramírez, autor del secuestro, indicó en un comunicado: “El canadiense se queda”, sin explicar las razones de la decisión.
Ahora, en el último comunicado, el Eln afirma que la multinacional Braeval, para la cual trabaja el canadiense “debería buscar una solución no militar a la retención que sufre su vicepresidente de exploraciones”, tras advertir que un rescate por la fuerza sería inviable.
“Una muestra de su voluntad de negociar, sería que devolviera los Títulos Mineros que sonsacó a las comunidades de mineros tradicionales de Mina Seca (1.526,91 hectáreas), La Nevera (880,32 hectáreas), Casa de Barro (200 hectáreas) y Las Nieves (36 hectáreas)”, señala el escrito.
Como se ha informado ampliamente, el Eln ha estado buscando su incorporación a un proceso de paz similar al que adelanta el gobierno con las Farc en Cuba.