Armada Impoluta

Compartir:

Por Gustavo Alvarez Gardeazabal

El oficio más antiguo del mundo es el de la prostitución.Como tal, ha sufrido todas las variantes de la evolución de la humanidad. Empero se le sigue juzgando, estigmatizando y utilizando como en los primeros tiempos. Hoy día, cuando existen las redes y las páginas de las citas y las fotografías por wasap para mostrar atributos y la profesión de vivir de hacer el amor se volvió para muchas ( y muchos) una forma discreta, comparada con la de las mujeres en las vitrinas de Amsterdam o las oleadas de todos los colores y sexos en el Parque del Retiro de Madrid,la explotación sexual, el modus vivendi o el abuso, se confunden en un amasijo de entradas y salidas.

Las modificaciones en la alimentación, la vertiginosidad conque se entra en la pubertad y la libertad de criterios y costumbres, acaban de turbiar el panorama para los arrebatos moralistas que por oleadas han azotado al mundo.

Por estos días, y para no quedarnos atrás con la cruzada anglosajona de convertir en abuso sexual el coqueteo, en Colombia decidieron que había que buscar las fuentes primigenias de la prostitución escudándose en el abuso sexual y la explotación de menores de edad. El resultado ha sido más escandaloso que suficiente, pero ha permitido correr el velo sobre una institución, la Armada, que es capaz de bañar con un óceano entero las embarradas de algunos de sus integrantes.

Aunque ya han echado millones de hectolitros  de agua sobre el Capitán Romero Pabón, quien usó su uniforme y su vinculación a la Armada para constituir casi que un harem donde todas debían llevar un tatuaje similar,que le significaba propiedad, nadie ha cuestionado la responsabilidad en la formación académica y moral del oficial y todos se han tragado el cuento de su desvinculación de la impoluta institución. Pero, ¿cuántos Romeros mas se habrán incubado en esas aulas de las escuelas navales?

PUBLICADO EN ADN

@eljodario

[email protected]

Compartir: