Desarticulada red que hurtaba gasolina subsidiada de la frontera

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BOGOTA, 23 de Septiembre_ RAM_ Una red de profesionales conformada por contadores, médicos, empresarios y contratistas prestantes del sector de los hidrocarburos, fraguó una estrategia criminal para sacar gasolina subsidiada de zona de frontera y venderla a un mayor precio en estaciones de servicio instaladas en departamentos de la Costa Atlántica.

La Policía Nacional, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, después de ocho meses de investigaciones descifró el engranaje criminal y puso en evidencia los roles que cumplían los integrantes de la estructura delincuencial.

Investigadores de la Dirección de Carabineros y Seguridad Rural, realizaron 12 allanamientos en Bolívar, Antioquia y Chocó; ubicaron pruebas sobre la millonaria defraudación y capturaron a 11 personas vinculadas al apoderamiento ilícito de combustibles.

Según las evidencias recopiladas, la organización sustraía ilegalmente gasolina destinada exclusivamente para su consumo en Chocó y vendida a menor valor, por ser un departamento fronterizo con la hermana república de Panamá. Mediante procedimientos irregulares como doble contabilidad y registros falsos, el combustible era extraído, transportado en vehículos cisterna y puesto en estaciones de servicio en diferentes regiones del país.

Además del desabastecimiento de gasolina que generaban en Chocó, por las cantidades que semanalmente hurtaban, generaron pérdidas superiores a los 350 mil millones de pesos para el erario público y el sector de los hidrocarburos.

Dentro de los capturados está Francisco de Paula Toro Giraldo, señalado como el cabecilla de la red, y quien durante varios años fue un reconocido proveedor de combustibles. El hombre de 61 años administraba los cupos de hidrocarburos subsidiados en la frontera, a través de una compañía que constituyó y dirigió, sin su firma no era posible desviar ilegalmente el producto.

Otro eslabón de la cadena criminal, estaba conformado por dos médicos profesionales, detenidos en un exclusivo apartamento en el sector de Manga en Cartagena (Bolívar). En los documentos encontrados, figuran como propietarios de las estaciones de servicio en municipios de la Costa Atlántica, a donde llegaba la gasolina que hurtaban en Chocó.

Por su parte, Dairo Eliécer Paternina Barrios, ubicado en Turbaco (Bolívar), era considerado el jefe de transportes de la red. Coordinaba la salida de vehículos de Chocó a los diferentes expendios donde era vendido el combustible a mayor precio.

Los demás capturados eran los conductores de los camiones cisterna, otros cumplían labores secretariales y de contabilidad. Todos conocían de primera mano el ilícito y mediante la falsificación de documentos o transporte sirvieron de auxiliadores.

Dentro de la investigación fue constatado el posicionamiento económico que alcanzaron los integrantes de la estructura. Algunos vivían en lugares reservados y en lujosos apartamentos, como los dos médicos detenidos en Cartagena, que protegían su residencia con una puerta blindada.

En el transcurso del día se cumplirán las audiencias de judicialización contra los 11 capturados por los delitos de concierto para delinquir y destinación ilegal de combustibles.

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